Es un sacerdote con novia, sorprendido por los paparazzi en una playa en Miami. Ahora, dice que está atrapado entre su amor por una mujer y el que le profesa a su Iglesia.
Solamente que el padre Alberto Cutié, más conocido como el Padre Alberto entre los católicos hispanos de Estados Unidos por su buena presencia y sus consejos en la radio y la televisión acerca de relaciones, no puede tener ambas cosas. Mientras Cutié decide entre el cuello romano y el anillo matrimonial, está seguro de una cosa: El no quiere convertirse en el «sacerdote anti celibato».
El escándalo que rodea al Padre Alberto desde que las fotos comprometedoras de la pareja fueron publicadas por la prensa el 5 de mayo ha reavivado el debate sobre el celibato obligatorio para los sacerdotes católicos.
Pero entre los católicos hispanos en Estados Unidos existe poco deseo de cambiar el statu quo, dicen encuestas. Eso es significativo porque difiere del punto de vista de los católicos blancos estadounidenses, más liberales — y porque los hispanos son un grupo creciente demográficamente que está cambiando la Iglesia en el país.
Las opiniones de los católicos hispanos sobre el celibato y el escándalo del Padre Alberto proveen una mirada a algunos de los valores de la comunidad. Entre ellos: un respeto a la autoridad, pero tolerancia cuando alguien falla y una cultura machista y amor por la familia que hacen que muchos hombres no tomen los votos de sacerdocio.
Karla Benítez, de 58 años, una católica que asiste a misa todas las semanas en una iglesia en Hialeah, Florida, dice que ella admira al Padre Alberto, pero siente que éste le falló a la iglesia y sus feligreses.
Al preguntársele si el caso de Cutié pudiera llevar a un cambio de las reglas de celibato de la iglesia, Benítez dice que ella no veía la correlación.
«Esto debería reforzar las reglas de la iglesia, no retarlas», dijo. «¿Por qué va este incidente a forzarnos a tolerar ese tipo de comportamiento del clero? No importa si la regla fue creada por Doios o no. Un sacerdote debe mantenerse fiel a la promesa que hizo».
Fotos del cura cubano-estadounidense abrazando a una mujer trigueña en una playa en Miami y en un bar aparecieron por primera vez en la revista mexicana TV Notas. La archidiócesis de Miami destituyó a Cutié de su parroquia y como jefe de su red internacional de radio.
En una entrevista con la CBS, el Padre Alberto, de 40 años, dijo que él ha estado involucrado románticamente con la mujer en la foto, una madre divorciada de 35 años, durante unos dos años.
«Yo no quiero ser el sacerdote anti celibato … yo pienso que el celibato es un buen compromiso con Dios. En mi caso, fue algo con lo que batallé durante un largo tiempo», dijo.
Antes del escándalo, el cura había dicho públicamente que la cuestión del celibato debería ser opcional para los sacerdotes. El clérigo no ha respondido a llamados de la Associated Press para una entrevista.