QUITO (AP) — El gobierno destacó el viernes como un «triunfo fenomenal» la recompra de 2.900 millones de dólares en papeles soberanos, casi un tercio del total de la deuda externa del país, mientras analistas advirtieron sobre riesgos y posibles consecuencias.
«Es un triunfo fenomenal del estado ecuatoriano, del gobierno ecuatoriano, de nuestro pueblo … no hay un país en el mundo que haya hecho una cosa similar a esta», declaró el ministro de la Política, Ricardo Patiño, al canal Gama Tv.
El gobierno demostró que «es posible, a pesar de la crisis financiera, a pesar de la baja del petróleo (principal rubro de exportación), haber hecho una negociación tan beneficiosa para el país como la que hemos hecho», agregó.
Desembolsando «900 millones (de dólares) retiramos esos bonos del mercado», señaló, en referencia a que los bonos Global 2012 y 2030 fueron recomprados con entre 65 y 70% de descuento de su valor nominal, que fue lo que el país ofreció a los tenedores de los papeles.
Según la ministra de Finanzas, María Elsa Viteri, gracias a la recompra el país dejará de pagar unos 7.505 millones de dólares entre el 2008 y 2030 cuando se terminaba de pagar la deuda.
El gobierno declaró la moratoria de los bonos 2012 y 2030, que suman 3.210 millones de dólares, después de que en el 2008 una comisión de auditoría consideró a tales obligaciones como «ilegales e ilegítimas» por la forma en que fueron adquiridas.
Las autoridades señalaron que todavía quedan en el mercado unos 289,7 millones de dólares en bonos y anticiparon que en los próximos días realizarían nuevas ofertas a los tenedores que quedaron fuera.
Sobre la posibilidad de que tenedores que no estuvieron de acuerdo con la recompra entablen demandas internacionales, el ministro Patiño dijo que «es casi mínima» por el alto porcentaje que accedió a la recompra.
Para Enrique Alvarez, director del departamento de investigaciones de los mercados financieros latinoamericanos de IDEAGlobal en Nueva York, «hay riesgos que no se pueden ignorar».
Ecuador se constituye en «un terrible ejemplo» porque en adelante para que el mercado otorgue préstamos a «países de alto riesgo» como Ecuador, «lo que va a demandar son rendimientos mucho más altos» para tener una salvaguarda ante ese tipo de situaciones, explicó a la AP.
También existirá «una barrera creada para direccionar inversión (extranjera nueva) hacia el Ecuador (porque) no hay claridad en las reglas del juego», dijo.
Alvarez, comentó que la posibilidad de juicios internacionales está latente «siempre que haya un acreedor a quien no se le ha pagado».
Señaló que en el mercado existe «la sospecha» de que la mayor parte de deuda fue recomprada por el gobierno antes de la propuesta oficial a los tenedores, aprovechando la baja cotización de los bonos por la declaración de moratoria y la crisis mundial.
El analista Ramiro Crespo, de la banca de inversiones Analytica Securities basada en Quito, considera que el proceso para la recompra de deuda «ha dejado al Ecuador en una situación un poco complicada en los mercados mundiales».
Advirtió que podrían darse investigaciones porque «podría ser considerado un caso de especulaciones» de mercado si se comprueba que Ecuador «ha manipulado precios» para recomprar.
Además, otro costo, será el cierre de líneas de crédito para la banca privada como asegura ocurrió desde que se declaró la moratoria de parte de la deuda.