CARACAS (AP) — Decenas de motociclistas que se identificaron como aliados al gobierno, atacaron el lunes la sede del canal de noticias Globovisión y lanzaron dos bombas lacrimógenas al interior de la televisora, dejando lesionados a un vigilante del medio y una policía metropolitana.
El director general de Globovisión, Alberto Federico Ravell, dijo a la prensa que cerca del mediodía un grupo de motociclistas, que portaban boinas rojas y banderas de la organización pro oficialista Unión Popular Venezolana (UPV), «asaltó» las instalaciones del canal de noticias, al norte de la capital.
Relató que algunos de los integrantes del grupo «amenazaron con armas» a los vigilantes para ingresar a las instalaciones, y lanzaron dos bombas lacrimógenas que generaron conmoción entre los trabajadores de la planta televisiva.
En el incidente, un vigilante de la planta sufrió una quemadura en la mano derecha, cuando trató de sacar de uno de los pasillos del canal una de las bombas lacrimógenas que lanzaron los atacantes, precisó el directivo.
Asimismo, una funcionaria de la Policía Metropolitana, que prestaba seguridad al canal, sufrió una herida en la cabeza al ser golpeada con un objeto contundente, reportó una clínica privada que la atendió.
Otras dos empleadas de Globovisión sufrieron asfixia por los gases lacrimógenos y debieron ser atendidas por personal médico, informó el canal.
El canal difundió varias imágenes, que captaron sus cámaras externas de seguridad, en las que se ven a varias decenas de motociclistas rodeando la entrada de la televisora mientras un grupo sometió a los vigilantes y entró por la fuerza a la planta para lanzar las bombas lacrimógenas.
En una de las tomas se observa a Lina Ron, dirigente oficialista y estrecha aliada del presidente Hugo Chávez, en una de las motocicletas que apostaron a las afueras de la televisora.
Ravell consideró el hecho como un «atropello» a la libertad de expresión y contra el derecho a la vida, y responsabilizó al presidente Chávez por lo que pueda ocurrir en el canal que es fuerte crítico del gobierno.
«Si usted lo quiere es acabar con nosotros, hágalo de una vez», expresó dirigiéndose al mandatario.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó el lunes «su profunda preocupación por el deterioro de la situación del derecho a la libertad de expresión en Venezuela.
La CIDH, órgano autónomo de la OEA, recordó que «desde el año 2000… ha venido observando una paulatina vulneración del ejercicio de este derecho en Venezuela y una creciente intolerancia a la expresión crítica».
Agregó en un comunicado que a través de la Relatoría especial para la libertad de expresión, la CIDH «ha conocido nuevos hechos que profundizan el deterioro de la situación, tales como el cierre de 34 radioemisoras, el ataque al canal Globovisión y la presentación de un proyecto de ley que busca imponer nuevas restricciones a la libertad de expresión».
El incidente contra el canal se da en medio de las tensiones generadas por la medida que tomó el gobierno el 31 de julio de retirarle la concesión a 34 emisoras, las cuales tuvieron que cesar sus operaciones.
Globovisión tiene abiertos cinco procesos administrativos ante un ente estatal por presuntas violaciones a la ley que regula el sector que podrían llevar al cierre del canal.
El ministro de Relaciones Interiores, Tareck El Aissami, condenó el incidente, y dijo a la televisora estatal que la policía judicial iniciaría una investigación para determinar responsabilidades.
«Sea quien sea, quien esté comprometido con esta acción violenta, con esta acción que no dudamos en calificarla como delictiva; debe ser puesto a la orden de la justicia venezolana… rechazamos que grupos pretendan sembrar de terror de violencia las calles de nuestro país», agregó El Aissami.
El Ministerio Público dijo en un comunicado que había iniciado una averiguación sobre el incidente.