LOS ANGELES — Efectivos de la agencia antidrogas estadounidense allanaron el viernes una farmacia de Beverly Hills como parte de la investigación por la muerte de Michael Jackson.
Agentes de la DEA (por sus siglas en inglés) allanaron la farmacia y restaurante Mickey Fine en busca de evidencia de suministro de sustancias ilegales, dijo el vocero de la agencia José Martínez.
La farmacia demandó al fallecido cantante en enero del 2007 por una presunta deuda de más de 100.000 dólares por medicamentos, incurrida en los dos años previos. La controversia se resolvió pronto y la vocera de Jackson en ese momento dijo que se debió a un problema con la administración de sus finanzas.
El allanamiento del viernes llegó una semana después que las autoridades catearon una farmacia en Nevada donde el doctor Conrad Murray, quien estaba con Jackson cuando éste murió, compró la anestesia propofol.
Los investigadores han dicho que Murray le dio esa droga a Jackson en las horas previas a su muerte y que lo investigan como parte de una investigación de homicidio simple. Hasta ahora no se han presentado cargos y la causa de la muerte de Jackson no se ha informado.
