TEL AVIV, Israel (AP) — El Papa Benedicto XVI llegó el lunes a Israel en una peregrinación emotiva a Tierra Santa y que buscará mejorar las relaciones con judíos y musulmanes.
El avión del Papa aterrizó en el aeropuerto internacional de Israel en Tel Aviv después de pasar tres días en la vecina Jordania.
Algunos dirigentes israelíes, entre ellos el presidente Shimon Peres y el primer ministro Benjamín Netanyahu, estuvieron presentes en la ceremonia de bienvenida al Sumo Pontífice en el aeropuerto.
Durante su visita de cinco días, el Papa visitará el monumento nacional del Holocausto y algunos de los sitios sagrados de Israel y de los territorios palestinos.
La visita ha generado una gran controversia en Israel porque el Papa pasó algún tiempo en los campos de la Juventud Hitleriana cuando fue adolescente. Benedicto XVI ha dicho que fue obligado a hacerlo.
Más temprano, en Amán, el Papa instó a cristianos y a musulmanes para que trabajen hacia la tolerancia religiosa y señaló que su visita a la mezquita más importante de Jordania era uno de los puntos culminantes de su gira hasta ahora por Tierra Santa.
Durante la ceremonia de despedida del Papa en aeropuerto internacional de Amán, el Papa también alabó al rey Abduláh II de Jordania por el tratamiento que se da a la diminuta minoría cristiana del país.
De acuerdo con estadísticas del Vaticano, los cristianos significan menos del 2% de la población de Jordania, mayoritariamente musulmana.
«Me gustaría animar a todos los jordanos, sean cristianos o musulmanes, a construir sobre las bases firmes de la tolerancia religiosa que permite a los miembros de diferentes comunidades a vivir juntas en paz y con respeto mutuo», dijo el Papa.
El Sumo Pontífice llegó a Israel para la parte final de cinco días de su gira, que durará toda la semana por Tierra Santa, que también lo llevará a los territorios palestinos.
Benedicto XVI será el segundo Papa en que hace una visita oficial a Israel después de Juan Pablo II, quien hizo una peregrinación por Tierra Santa en el año 2000.
El Papa tendrá que hablar con mucho cuidado en esta gira por Medio Oriente luego de que ha sido duramente criticado tanto por musulmanes como por judíos. En Jordania, dijo que tenía «un profundo respeto» por el Islam y visitó la mezquita más grande del país, donde no oró pero sí tuvo un momento de reflexión.
Benedicto XVI enfureció a muchos musulmanes hace tres años, cuando citó un texto medieval que calificaba algunas de las enseñanzas del Islam del Profeta Mahoma como «malignas e inhumanas», particularmente «su orden de difundir su fe a través de la espada». Sin embargo, expresó su arrepentimiento porque sus comentarios habían ofendido a los musulmanes.
El Papa también generó reacciones airadas entre los judíos a principios de año cuando revocó la excomunión de un obispo ultraconservador que niega la existencia del Holocausto. Más tarde el lunes, el Papa llevará una ofrenda floral al Monumento Memorial del Holocausto, el Yad Vashem.
Al despedirse del Papa, el Rey Abduláh hizo un llamado fuerte para una solución de dos estados para los israelíes y palestinos. Durante su estancia de tres días en Jordania, el Papa expresó su esperanza de que la Iglesia Católica se convierta en un factor de paz en la región.
«Es tiempo de que acabe el sufrimiento a través de un acuerdo que les garantice a los palestinos sus derechos a la libertad y a la estatidad, y que les de a los israelíes la aceptación y la seguridad que necesitan», dijo Abduláh en su discurso ante el Papa.
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