WASHINGTON — El presidente Barack Obama advirtió el martes que si no se reforma profundamente el sistema de salud los estadounidenses podrían quedar sin cobertura médica, intensificando su campaña por lograr la reestructuración de un sector que muchos denuncian como excesivamente burocrático y dominado por corporaciones.
«Reformar el sistema no es un lujo, es una necesidad», dijo Obama en una conferencia de prensa.
Las declaraciones del presidente surgen en medio de intensas negociaciones en el Congreso para reformar el sistema de cuidados médicos en Estados Unidos. Se estima que unos 50 millones de estadounidenses carecen de seguro médico y Obama ha prometido tratar de corregir eso.
Obama desestimó las críticas de la industria de las aseguradoras contra su plan de hacer que el sistema de salud sea administrado en parte por el gobierno y no solamente por el sector privado.
«¿Por qué arruinaría a las aseguradoras privadas?», preguntó el presidente retóricamente, recordando que el sector privado reiteradamente se autocalifica como el mejor y denuncia que el gobierno no puede administrar nada.
Obama expresó que la posición oficial es que «tiene sentido tener un plan de salud con el financiamiento público».
(ap)