Por JULIE WATSON
MEXICO — El astronauta José Hernández dijo el lunes que Estados Unidos necesita legalizar a sus inmigrantes indocumentados, una postura pública inusual para un viajero espacial estadounidense sobre un asunto político candente.
Los mexicanos han escuchado con atención cada palabra del primer astronauta de la NASA que se comunica en español a través de internet, con el alias de Astro_Jose, desde que el hijo de migrantes mexicanos se embarcó en su misión de dos semanas y 5,7 millones de dólares a la estación espacial internacional, viaje que terminó el viernes.
Y ellos lo siguen escuchando ahora que está de regreso en la Tierra.
Durante una entrevista telefónica con la cadena mexicana Televisa, Hernández pidió una reforma migratoria en Estados Unidos, un asunto crucial para México que se ha quedado estancado en Washington en medio de un intenso debate.
«La economía americana (estadounidense) los necesita», dijo Hernández, de 47 años y nacido en California, quien trabajó duro en los campos de pepino, remolacha y tomate junto con sus padres. «Creo que es justo tratar de encontrar una forma para legalizarlos y darles una oportunidad para que trabajen en lo abierto, para que también ellos se puedan jubilar en un sistema tradicional en los Estados Unidos», agregó.
James Hartsfield, vocero de la agencia espacial, dijo a la AP que Hernández estaba expresando sus puntos de vista personales, «no representando a la NASA, a la oficina de astronautas o a cualquier organización de la NASA en sus respuestas».
Hernández dijo que desea que todos los líderes mundiales y políticos pudieran ver la Tierra como él lo hizo, «para que vieran nuestro mundo; que realmente somos uno, que deberíamos trabajar juntos».
«Lo que me sorprendió mucho es cuando vi al mundo como uno: no había fronteras, no se podía distinguir entre Estados Unidos y México», dijo a Televisa.
El éxito de Hernández muestra por qué los migrantes mexicanos han arriesgado sus vidas para cruzar ilegalmente la frontera de Estados Unidos como una forma de salir de la pobreza.
Millones de mexicanos miraron diariamente la misión de Hernández a través de Televisa y lo siguieron a través del sitio Twitter de internet, donde sus despachos aparecieron tanto en inglés como en español.
Hernández también bailó salsa, comió burritos y discutió sobre las aspiraciones de México para acudir a la Copa Mundial de fútbol mientras flotaba en el espacio a bordo del transbordador Discovery.
Misiones anteriores de la NASA tuvieron poca mención en los noticieros mexicanos.
Mientras tanto, el poblado de Ticuitaco, en el estado mexicano de Michoacán, quiere construir un museo de la ciencia en su honor para inspirar a otros a que sigan los pasos de Hernández.
«José Hernández es un ejemplo para la juventud», dijo el alcalde Ricardo Guzmán.
Agencia AP.
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