Por FEDERICO QUILODRAN
SANTIAGO DE CHILE — A un mes de la elección presidencial y parlamentaria, comenzó este viernes oficialmente la campaña electoral con una guerra de afiches y carteles de los candidatos y con la transmisión de una franja televisiva.
La policía incautó carteles e incluso detuvo a un activista cuando en el inicio de la batalla propagandística se instalaron afiches de candidatos en lugares prohibidos de la concurrida plaza Italia, en el centro de la capital.
La avalancha propagandística se reflejó sobre todo en las calles, que amanecieron tapizadas de afiches y carteles. En avenidas aledañas al centro capitalino o que conducen al sector alto de esta capital se observaba especialmente gran profusión de carteles del candidato de la oposición derechista Sebastián Piñera, con imágenes en tamaño natural del favorito para triunfar en los comicios del 13 de diciembre.
En la franja televisiva gratuíta de 20 minutos destinada a los grupos parlamentarios en pugna que se transmitió al mediodía el oficialismo usó reiteradamente la figura de la presidenta Michelle Bachelet, quien goza de una alta popularidad que en algunas encuestas alcanza al 80%.
Por la noche, una franja televisiva similar dedicada a los cuatro candidatos presidenciales, en la que cada uno de ellos dispondrá de 10 minutos para tratar de convencer a un electorado que según todas las encuestas parece bastante definido.
En el último de los sondeos esta semana Piñera obtuvo el 36% en la primera ronda a diez puntos del ex presidente Eduardo Frei, representante del oficialismo. En tercer lugar se situó el independiente y ex oficialista Marco Enríquez-Ominami con 19 puntos y en cuarto lugar el izquierdista Jorge Arrate con un 5%
A Piñera uno de los integrantes del comando de Frei le criticó que su campaña televisiva sea similar a la que desarrolló el presidente estadounidense Barack Obama.
El candidato opositor sigue siendo objeto de fuego cruzado de sus adversarios por el apoyo que le brindó a ex militares al prometerles acelerar los procesos en que están sometidos centenares de uniformados retirados por su participación en violaciones a los derechos humanos.
Frei dijo el viernes que «o se está con los violadores a los derechos humanos o con las víctimas» y agregó que en su eventual gobierno no aceptará una ley de amnistía.
En la elección se elegirá, además del sucesor de la presidenta Michelle Bachelet, a los 120 integrantes de la Cámara de Diputados y a 18 de los 38 senadores.
Mientras tanto, la presidenta desvirtuó por ahora la posibilidad de volver a postularse el 2014 por de especulaciones que llamó de «política ficción».
(AP)