BOGOTA — Antonio Cervantes, el primer boxeador colombiano que conquistó una corona mundial, recayó en el consumo de alcohol y narcóticos y fue internado en una clínica siquiátrica, informó su hermana Esther Julia.
«Kid Pambelé», de 64 años y padre de 11 hijos, lleva una vida disipada desde hace tiempo, y en varias ocasiones ha estado internado en centros especializados de Colombia y Cuba.
El ex boxeador en los últimos meses deambulaba en los alrededores del estadio Jaime Morón y otros sitios de Cartagena, en el Caribe colombiano, cuando fue conducido a la clínica Simón Santander en el fin de semana.
«Antonio lleva una vida muy mala, sin disciplina, su vida es terrible, cuando recae es muy difícil vivir a su lado, el comportamiento es muy feo, deseamos que permanezca en un centro de rehabilitación hasta que se recupere», dijo su hermana Esther Julia en una entrevista telefónica con AP.
La hermana del ex campeón destacó que cuando no esta bajo los efectos del alcohol y los narcóticos se comporta de maravilla.
«Antonio es buen hermano, buen hijo y padre, nos ayuda a todos pero cuando recae es un desastre y hasta lo han atracado varias veces», subrayó.
Cervantes disfruta de una pensión del Instituto Colombiano de Deporte, ocasionalmente vende libros y, antes de recaer, tenía planeado participar en una película sobre su vida.
El púgil saltó a la fama cuando en 1972 derrotó al panameño Alfonso «Pepermint» Frazer y se apoderó de la corona de los welter junior. La defendió en 10 ocasiones durante tres años.
El puertorriqueño Wilfredo Benítez lo destronó en 1975 y recuperó el cetro tres años más tarde tras vencer al argentino Carlos María Jiménez.
Aaron Pryor acabó definitivamente con la carrera del popular «Kid Pambelé» en julio de 1980.