Por BRADLEY BROOKS
RIO DE JANEIRO — La esposa de Arturo Gatti, acusada de estrangular al campeón con la correa de su bolso de mano, declara su inocencia y su amor por su esposo muerto en una carta entregada el miércoles a The Associated Press.
Aunque rechazó ser entrevistada desde su celda en la ciudad de Recife, en el noreste de Brasil, Amanda Rodrigues, de 23 años, sí entregó una carta escrita con tinta roja en papel blanco a rayas.
«Este es un dolor que se ha convertido en inexplicable e intolerable, esta pérdida y esta acusación maliciosa», escribió Rodrigues, nacida en Brasil. «¡Perdí a mi esposo!»
Rodrigues dijo a los investigadores que cuando se despertó el sábado, aproximadamente a las 6 de la mañana, encontró el cadáver del boxeador canadiense en el departamento que rentaban en Porto de Galinhas, una ciudad turística costera en el estado de Pernambuco. Entonces llamó a la policía.
Pero los investigadores dicen que ella es la única sospechosa en el caso, y tienen la certeza de que mató a Gatti en el apartamento donde la pareja llegó la semana pasada junto con su hijo de 10 meses para pasar unas vacaciones. El niño no está herido y se encuentra con la familia de Rodrigues.
«Soy inocente y sé que ésto será demostrado en los próximos días», escribió Rodrigues.
Pero los que conocían a Gatti y a Rodrigues en Estados Unidos y Canadá han dicho que su relación era tormentosa.
«Ella gritaba todo el tiempo, siempre estaban discutiendo y cuando peleaban ella decía ‘¡Te voy a matar!»’, dijo la madre de Gatti, Ida, a la AP vía telefónica desde Montreal.
De acuerdo con registros en la división penal de la Corte de Quebec, a Gatti le imputaron un cargo el 16 de abril por violar una orden restrictiva interpuesta en su contra. Los registros no indican quién solicitó la orden, pero la madre de Gatti confirmó que fue Rodrigues la que pidió una contra el boxeador. No ofreció más detalles.
Geraldo DiFrancesco, padrastro de Gatti, dijo que la pareja solía pelear, pero que a él le «sorprendió» que esto haya llegado tan lejos como para terminar en la muerte del púgil.
«Uno nunca puede esperar que ocurra algo como eso», afirmó.
Chuck Zito, un actor y amigo cercano de Gatti que conoció al boxeador hace 13 años y lo acompañó al ring en varias de sus peleas más notables, dijo estar al tanto de que la pareja tenía problemas.
«Las cosas estaban muy inestables. Estuvieron inestables desde el principio (de la relación)», afirmó Zito. «El dijo que probablemente se iban a divorciar».
Zito indicó que Gatti conoció a su esposa en el club de desnudistas Scores en Nueva York, y que los amigos del boxeador intentaron persuadirlo para que no se casara con ella.
Sin embargo, en su carta Rodrigues rechazó las críticas.
«La gente más importante en mi vida, que nos conocen, saben el tamaño de nuestro amor», escribió. «Lo que me duele es saber el sufrimiento de mi familia y amigos. Lo que me duele es saber que mi esposo no estará en mi casa aguardando mi retorno».
En unos días será dado a conocer el reporte de la autopsia.
Milena Saraiva, portavoz de la policía, dijo que el púgil estaba muy borracho, al punto de quedar totalmente incapacitado para actuar en el momento.
En su carta, Rodrigues permaneció optimista, y le escribió a su hijo: «Junior, ¡mamá estará pronto en casa!»
(AP)
