Por MATTHEW LEE
KINSHASA, Congo — Hillary Clinton no pudo escapar de la sombra de su esposo en Africa: un estudiante universitario en el Congo le preguntó qué pensaba el ex presidente Bill Clinton sobre un asunto financiero internacional.
«Mi esposo no es el secretario de Estado, soy yo», dijo molesta, en un intento por reclamar su papel central en la conferencia. «No voy a estar fungiendo como canal de mi esposo».
La presencia de Hillary Clinton, tan audaz durante su histórica candidatura presidencial frente a Barack Obama, ha sido difícil de percibir en los meses que ha laborado como representante de la política exterior de Estados Unidos.
Los ambiciosos viajes del presidente Obama han opacado los suyos, enviados especiales de alto perfil han sido asignados a los sitios con los problemas más álgidos del mundo, el vicepresidente Joe Biden también ha realizado misiones internacionales y, por último —cuando la secretaria aterrizaba en Africa la semana pasada para una gira por siete países— su esposo logró la liberación de dos periodistas en Corea del Norte.
«¿Quieres que te diga lo que piensa mi esposo?», preguntó Clinton con incredulidad cuando un estudiante la interrogó sobre un crédito de miles de millones de dólares que China le ofreció al Congo.
«Si quieres mi opinión, te daré mi opinión», dijo la diplomática. «No voy a estar fungiendo como canal de mi marido».
El moderador rápidamente cambió de tema.
Funcionarios del Departamento de Estado dijeron que el estudiante se acercó a Clinton posteriormente y dijo que se había querido referir a lo que pensaba Obama, no Bill Clinton, con relación al préstamo chino. Un asesor de alta jerarquía dijo que Clinton le aseguró al estudiante que no se preocupara por lo ocurrido.
La pregunta del estudiante, de acuerdo con la traducción del Departamento de Estado, fue esta: «Señora Clinton, todos hemos escuchado de los contratos chinos en este país. La interferencia es de parte del Banco Mundial en contra de este contrato. ¿Qué piensa el señor Clinton a través de la boca de la señora Clinton y qué piensa el señor (Dikembe) Mutombo (ex basquetbolista de la NBA) de esta situación? Muchas gracias».
Se desconoce si el estudiante francoparlante o el traductor se equivocaron. Sea como sea, a Clinton no le agradó escuchar el nombre de su esposo.
