ASUNCION (AP) — Paraguay se clasificó el miércoles a su cuarta Copa Mundial consecutiva al vencer de local 1-0 a una Argentina, que quedó en zona de repechaje en las eliminatorias sudamericanas y en alto riesgo de perderse la máxima cita.
Nelson Haedo Valdez marcó a los 27 minutos el gol de la victoria y que significó el boleto directo a Sudáfrica 2010, a falta de dos partidos para el final de las eliminatorias sudamericanas.
Haedo Valdez fusiló al portero Sergio Romero con un remate de zurda a media altura, tras recibir un pase de Salvador Cabañas.
El equipo dirigido por Diego Armando Maradona, que venía de perder 3-1 ante Brasil, se mostró lento y desorganizado en defensa, y sin fuerzas en el ataque, complicándose aún más su situación con la expulsión de su volante Juan Sebastián Verón a los 53.
Con un choque de local contra Perú y otro de visita frente a Uruguay, Argentina se jugará la vida en unas eliminatorias que se le han complicado como nunca. En tanto, Paraguay irá a Venezuela y posteriormente de local medirá a Colombia.
Se trata de la primera vez que el dos veces campeón del mundo tiene cuesta arriba la clasificación bajo el formato todos contra todos que se implementó en Sudamérica para el mundial 1998. Argentina no se pierde un mundial desde México 1970.
Al término del partido, en medio de la euforia, los jugadores paraguayos se reunieron a un costado de la cancha con el técnico argentino Gerardo Martino en el medio para rezar el «Padre Nuestro» y «Ave María».
En Argentina, en cambio, el resultado acentuó una situación crítica. Fue la cuarta derrota encajada por los Albicelestes en sus últimos cinco partidos por las eliminatorias, y la misma pondría echarle más fuegos a las críticas sobre el desempeño de Maradona como entrenador.
Hoy por hoy, Argentina estaría jugando el repechaje contra el cuarto de la CONCACAF, algo inconcebible al considerar el reparte de estrellas en su selección, como Lionel Messi y Javier Mascherano.
En el primer tiempo, Cabañas fue un dolor de cabeza permanente para la zaga argentina, que debió multiplicarse por encima de sus limitaciones para contener sus gambetas cortas para sacarse rivales de encima. Haedo Valdez, el hombre de punta, llegaba desde atrás para secundar los ataques de Cabañas, apoyado por Edgar Barreto.
Justamente, Haedo Valdez tocó la sirena de alarma para Argentina cuando remató por el poste a los siete y a los 23 Jonathan Santana otra vez disparó la pelota directo al travesaño.
La recia marca de los paraguayos no permitió que los delanteros Messi y Sergio Agüero pudieran lucirse como se esperaba.
Argentina intentó tomar control de las acciones desde los primeros instantes con Verón como el principal iniciador de las jugadas desde atrás pero, lentamente, fue opacada.
Desesperado porque el juego se le escapaba, Maradona metió a los gigantes y veteranos Martín Palermo y Rolando Schiavi para pescar por algún frentazo en el área rival y casi consigue su objetivo a los 90 cuando el segundo llegó tarde para cabecear el balón en una acción cara a cara con el portero Justo Villar.
El partido se disputó en el estadio Defensores del Chaco.
