BRASILIA — El presidente colombiano Alvaro Uribe llegó el jueves a esta ciudad y se reunió con su colega brasileño Luiz Inacio Lula da Silva para conversar sobre el plan de incrementar la presencia estadounidense en Colombia.
Al final del encuentro de dos horas, el único comentario que hizo Uribe a periodistas fue: «Les agradezco inmensamente a todos ustedes». Luego se dirigió al aeropuerto.
La cadena televisiva Globo dijo que Lula le pidió garantías a Uribe de que los planes de permitir que tropas estadounidenses se desplieguen en siete bases militares colombianas estarán limitados al territorio de Colombia.
La misma cadena indicó que el mandatario brasileño le pidió a Uribe transparencia en sus negociaciones con los estadounidenses.
Al parecer, la solicitud de Lula se refiere a los temores generalizados de que naciones extranjeras quieren invadir el Amazonas para explotar sus recursos naturales.
En la reunión participaron el ministro de Defensa Nelson Jobim, el canciller Celso Amorim y Marco Aurelio Garcia, asesor de Lula en asuntos internacionales.
Tras el encuentro, Amorim le dijo a medios locales que «el presidente Uribe nos dio las explicaciones que pensó tenía que darnos con respecto a los objetivos del acuerdo con Estados Unidos», según la estatal agencia de noticias Brasil.
«Le reiteramos de nuevo que si el acuerdo con Estados Unidos se limita al territorio colombiano, entonces es naturalmente un asunto de la soberanía colombiana», añadió.
Amorim agregó que el acuerdo requiere «más conversaciones no sólo con Colombia, sino también con Estados Unidos».
Según el ministro, Lula defendió el Consejo Sudamericano de Defensa, creado en diciembre, como el foro ideal para discutir temas polémicos, como esta eventual alianza de Colombia con Estados Unidos.
«Justamente para permitir que ciertas cuestiones puedan ser respondidas con tranquilidad y en clima de confianza y de forma técnica. Lógico que no somos ingenuos y sabemos que muchas veces eso no es una cosa fácil», explicó Amorim.
Horas antes, Uruguay se opuso a la «existencia o establecimiento» de bases militares extranjeras en cualquier territorio de Latinoamérica. El pronunciamiento se formuló poco después que el presidente Tabaré Vázquez se reunió con Uribe.
La cancillería uruguaya dijo en un comunicado que Vázquez le reiteró a Uribe que Uruguay respeta «el principio de no intervención en los asuntos internos de los estados como eje fundamental en las relaciones internacionales».
Pero también «reiteró la posición histórica de Uruguay contraria a la existencia o establecimiento de bases militares extranjeras no sólo en el país, sino también en cualquier territorio de América Latina».
Uribe concluye su gira por Sudamérica para explorar la posición de sus pares sobre una eventual llegada de militares estadounidenses a su país para combatir el narcotráfico.
«Me siento agradecido al gobierno y pueblo uruguayos y contento por el dialogo», dijo Uribe a periodistas en Montevideo antes de partir rumbo a Brasilia.
En las anteriores escalas de su gira, Uribe cosechó apoyo o por lo menos neutralidad ante sus planes de los presidentes de Paraguay, Chile y Perú; encontró oposición en Bolivia y Argentina.
AP.
