Un nuevo episodio en el complicado y agitado entramado de la muerte del joven estudiante de la Universidad de los Andes, Luis Andrés Colmenares, se vivirá este viernes a partir de las 3:00 de la tarde, cuando un juez de la República decida sobre la apelación a la medida de aseguramiento en casa por cárcel que pesa sobre las jóvenes Laura Moreno y Jessy Quintero, acusadas de estar involucradas en el homicidio del muchacho, de acuerdo con la tesis de la Fiscalía.
Negada en una primera oportunidad, a lo largo de una diligencia que aunque no contó con la presencia de las dos jóvenes sí se vio abarrotada por decenas de curiosos, amigos, familiares de ambas jóvenes y periodistas que en aquella oportunidad debieron resignarse a intentar escuchar los diferentes pronunciamientos desde el pasillo adjunto, la atención vuelve a concentrarse respecto a si el nuevo juez cambia de parecer o sostiene la determinación de mantener a las Laura y Jessy encerradas en sus respectivas casas.
El pasado 24 de enero un juez de control de garantías negó la primera solicitud para dejar en libertad a Moreno y Quintero, bajo el argumento de que a juicio de los abogados Jaime Granados y Silvio Quiñones habían transcurrido más de 120 días desde la fecha en que sus dos clientas habían sido enviadas a la casa por cárcel tras la audiencia de imputación de cargos y medida de aseguramiento solicitada por la Fiscalía el 7 de octubre de 2011.
Argumentos que fueron desestimados por el juez 29 de conocimiento, para quien la gravedad de los cargos (coautoría impropia en homicidio agravado y falso testimonio) y el hecho de que se tratara de más de una persona implicada, eran argumentos más que suficientes para extender a al menos 120 días calendario (con domingos y feriados) el periodo que se debía esperar para comenzar el juicio.
Situación que motivó la inmediata apelación por parte de la defensa, que este viernes deberá ser resuelta por un juez de segunda instancia, quien como es apenas obvio podría ratificar la medida o dejar en libertad inmediata a las dos imputadas; cuyos respectivos abogados están en su derecho de volver a solicitar la excarcelación de Laura y Jessy tantas veces como lo estimen conveniente antes de que se dé inicio formal al juicio en contra de ambas, que como es de amplio conocimiento se mantiene aplazado hasta el próximo 12 de marzo.
Nuevos argumentos que podría esgrimir la defensa según expertos abogados en derecho penal consultados por Terra Colombia, serían los de que si bien el juicio efectivamente arrancó el pasado lunes, la Fiscalía no ha hecho lectura formal de la acusación en contra de Moreno y Quintero, debido a que tanto Granados como Quiñones solicitaron la nulidad del proceso; no obstante a que el fiscal Antonio Luis González podría argüir en su favor que el proceso se encuentra detenido precisamente por dicha solicitud expresa de la defensa.
DUELO MEDIÁTICO
Entre tanto, las declaraciones y “nuevas” versiones sobre lo que pudo o no haber ocurrido la noche del 30 y la madrugada del 31 de octubre de 2010 continúan a la orden del día, de manera que hace un par de semanas volvía a insistirse en la tesis del accidente y en la posibilidad de que efectivamente Luis Andrés Colmenares perdió la vida al saltar al caño de parque El Virrey, pese a las múltiples fracturas que presenta su rostro y a que su cuerpo apareció a unos 120 metros de donde Laura Moreno reportó su caída.
Hipótesis a la que hace tan solo un par de días ripostó la defensa de la familia Colmenares, representada por el prestigioso abogado Jaime Lombana, de acuerdo con la cual al menos dos escoltas de Laura Moreno habrían sido los directos responsables de la muerte del joven estudiante, no obstante a que de acurdo con la versión de los abogados de Moreno y Quintero estaba probado que la totalidad de los escoltas encargados de custodiar a la joven no estaban en Bogotá ese día, sino en una de las fincas del padre de Laura situada en La Dorada (Caldas).
De hecho, en ninguno de los apartes del escrito de acusación cuyo contenido fue revelado hace un par de semanas se habla de la posibilidad de adelantar cualquier tipo de acción contra alguien diferente a Laura o Jessy, aparte de Carlos Cárdenas -quien mantuvo una relación sentimental con Moreno antes y después de la muerte de su compañero de estudios-, a la fecha figura como indiciado y está siendo investigado por el fiscal 11 de la Unidad de Vida tras haberse negado a comparecer ante ese despacho en el mes de diciembre pasado.
Aunque la Fiscalía ha preferido evitar hacer cualquier tipo de pronunciamiento sobre el particular, se sabe que efectivamente se está muy cerca de encontrar al o los directo (s) responsable (s) de la muerte del joven Luis Andrés; no obstante, hasta que ese momento no se registre de acuerdo con la defensa de Laura y Jessy, el ente acusador carece de una prueba contundente que pueda probar su hipótesis del homicidio.
De manera que entre tanto, es de esperarse que los abogados de parte y parte continúen ventilando sus propias versiones de lo ocurrido en diversos medios de comunicación, a riesgo de que como lo destacara el propio Granados se continúe enturbiando y contaminado un proceso sobre el que continúa corriendo demasiada agua debajo del puente, y del que se han planteado las más diversas y hasta absurdas hipótesis respecto a los presuntos autores de un crimen que permanece en el misterio.
Solo la justicia penal –quien es la que tendrá la última palabra- deberá resolver si se trató de un homicidio o un accidente. Como quiera que hubiera sido, el debate sigue abierto y las especulaciones
Inmformacion terra colombia
